¿Interesa al hombre de hoy el ensayo o el estudio teológico? ¿Responden a las necesidades de la Iglesia y del hombre? ¿Es necesario seguir escribiendo cuando ya se ha escrito tanto?
Cuando el objeto estudiado es infinito, como es la Tercera Persona de la Trinidad, y los aportes de los estudios teológicos abren nuevos caminos y perspectivas, se suscita la curiosidad. A veces la polémica o el diálogo teológico impulsan el estudio desde una perspectiva que parece interesante, y continúa la invitación a escuchar y a creer. De esta manera, comunicar lo escuchado y creído se convierte en un imperativo.
Esta obra se centra en los datos de la Revelación –principalmente Sagradas Escrituras y Tradición patrística– en dos núcleos temáticos. El primero referido a las primeras polémicas acerca del Pneuma divino: su divinidad, su persona y su procesión; pretende allanar conflictos que se generaron, muchas veces, por la mala comprensión de los términos y de los resupuestos teológicos. El segundo a su irradiación, profundidad y plenitud, para incursionar en temas que podrían abrir perspectivas de estudio de las distintas ramas de la teología desde la pneumatología.